Bueno que puedo decir el martes estaba pero bien, bien oscuro, como
siempre estaba haciendo mi pataleta camino al abismo del drama, tanto que ya había
escrito una larga carta en donde como siempre describía con lujo de detalles
todo lo que había pasado dividido analíticamente en dos partes, por que obvio
tenia que dejar una enseñanza que no la tenia clara si no hasta el final del
escrito cuando relataba la primera parte me di cuenta que ya era muy tarde para
escribir algo así, a medida que continuaba con la idea llegaba a mi la conclusión,
que como otras veces había llegado a un
nuevo nivel de idiotez, donde me limitaba a repetir algunas tendencias propias mías
y de las cuales asumo la completa responsabilidad. A medida que escribía puedo
decir, que no era exactamente el mismo circulo, había algunas cosas en común, pero
no siempre es igual por que hay siempre algunas pequeñas diferencias, la principal
era que ya sabía cómo terminaría todo esto.
En el segundo párrafo ayudaba a sustentar mi caótico estado de ánimo,
en ese momento analizaba la fábula del gato, pero no podía ser directo, por que
por algunas noches fue el tema de conversación y no podía soltar un detalle más,
debido a que esta bien pensar que nunca encontraras la conexión, pero tampoco
lo pondré tan fácil, tan fácil que ya lo sentía como un abuso de confianza
hacia alguien que no podría unir los puntos de la figura. Luego de terminar
ambos sustentos de mi pataleta y frustración de que las cosas no sean como yo quería,
me limite a leer todo y entonces recién empezó lo interesante.
Días atrás mientras poco a poco se calmaba la marea, veía una entrevista
entre dos generaciones, en un momento se llego a la conclusión que todo es
transitorio y eso lo había olvidado, con el tiempo empiezas a encariñarte con
las cosas que te rodean y esto se aplica a todo va desde cosas materiales como
un libro o una tele y transita entre las relaciones y podría decir que hasta el
amor. En este momento me dirás, pero acaso no es que el amor es para siempre,
la mala noticia es que no es así, todo sentimiento cambia y evoluciona pasa por
varias etapas, pero las cosas pueden acabar en cualquier momento y puedes pasar
el tiempo midiendo tus pasos para no salir lastimada a sabiendas que es algo
pasajero o puedes dar todo lo posible para mantener ese vínculo y que dure lo máximo
posible, siempre y cuando sea sano y no termines destruyéndote en el camino. Digo
esto por que hace tiempo toque el tema de que si bien quería encontrar cosas
que duren mucho tiempo aún tengo la decisión que será en mis términos, alejarme
de las medias tintas por el temor de pensar diferente; y fueron muchas veces
las que me dije, sabes que en virtud a que no puedo estar paseando por todos
lados, cosa que es algo que hago muy seguido, preferí en lugar de eso establecerme,
pero aun así hubieron situaciones, relaciones que fueron cambiando y ahora ya
no son lo que eran antes y eso a veces me jodía y ahora ya no. Deje de
cuestionarme eso, ahora en parte pienso que hare todo lo posible para estar a
la altura de lo que me pidan siempre y cuando piense que vale la pena y hay, de
alguna manera algún tipo de crecimiento en alguna de las partes y si no, no
sigo mi camino y ya. Y así fue que llegue a la enseñanza de la semana, todo esta
de paso, todo, uno decide que tanto quiere quedarse y quizá hay un nivel un
poquín más complejo en el caso de las relaciones, pero el principio es el mismo.
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