De hecho, si me saca de cuadro cuando entro en el conflicto constante de que me vean más de cerca pero no tanto como para sentirme invadido, quizá irónicamente como escribiría hace tiempo la idea es mantener una distancia ni muy cerca pero tampoco muy lejos, es casi como este blog, me agradaría mucho que leyeran más personas que dejaran sus comentarios con las consecuencias que trae consigo, pero al mismo tiempo coincido que el nivel de confianza de la gente que lee es tal que no es algo que se comparta a menudo y eso por ratos me distrae queriendo algo que sé que no me gustara. Ahora de hecho si hay mucha contradicción en todo lo que escribo desde el uso desmesurado de la palabra pero que uso para generalmente escribir una idea contraria al párrafo anterior, o la cantidad de oraciones irregulares con las que intento condensar a veces varias ideas en un solo escrito y eso por ratos me hace analizar la mejor forma de que todo quede encerrado en una idea.
Por eso también llegue a la conclusión que indirectamente la historia central esta salpicada con pequeños mensajes que aprovecho en enviar, la mayoría de ellos con la certeza que no llegaran al destinario pero algunos con la firme seguridad de que se cómo reaccionaran, solo son chispazos que entran como piezas en un todo y eso me agrada debido a que hace tiempo entendí que podía hacer muchas cosas en unos pocos párrafos, inclusive muchas de esas ideas son enviadas a mi yo del futuro el cual lee con suma vergüenza las tonterías que escribo no sin antes tomar en cuenta los cambios por los que estaba pasando y cuales eras las circunstancias que me llevaron a escribir algo así.
Por estos días Lima esta fría y tiene esa humedad característica de la costa que está en pleno Otoño, provoca quedarse en cama pero al mismo tiempo me recuerda lo que hacia en otros tiempos, cuando anhelaba quedarme viendo una serie larga abrigado entre las mantas, reviso los mensajes y es cierto que extraño conversar los fines de semana, pero eso es por otros motivos más allá de los evidentes, lo que me hace plantearme nuevamente si es necesario conformarme con lo que hay o seguir buscando lo que quiero yo, esa misma premisa se repite en muchos aspectos de mi vida; es muy probable que opte por la segunda opción. Pero no negare que me agrada siempre estar midiendo entre los extremos y tender siempre a la armonía pasajera, situación que muchas veces es esquiva.
Finalmente, la historia se sigue escribiendo recupere a alguien que se alejó, pero también perdí a alguien que decidió alejarse, en ambos casos pude hacer algo diferente, llega un momento de la montaña rusa que se puede tomar una decisión a veces sale bien, a vece sale mal inclusive es mucho más difícil vivir con las consecuencias de las decisiones tomadas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario