Fue la semana pesada, era fin de mes y no había mucho tiempo para
hacer algunas cosas que suelo hacer, deje de lado un poco de mis costumbres
tranquilas por cumplir con el objetivo, eso debería tener alguna relación pero
como estaba ocupado, estaba distraído y por eso no pensaba mucho, pero en mi
empezaba a nacer una ilusión, un plan complejo dependiente de muchas cosas que
terminaba con un desenlace deseado, este plan en pasadas ocasiones ya lo he
tenido pero mucho, mucho más adelante, últimamente lo que ocurría era que ni
bien empezaba a tener un indicio de esta idea todas las condiciones cambiaban y
el plan entrelazado se caía rápidamente. En este momento pensaras que tiene que
ver el estar muy ocupado y tener un plan intrincado; pues poco a poco empezaran
a cuadrar las piezas en la imagen.
Por otro lado, camino todo el tiempo entre la ilusión y la realidad,
de hecho el querer algo me hace avanzar y hacer todo lo posible para llegar a
eso, dentro de lo que sea también saludable tomando un poco de precaución
soltando un poco la rienda para no ser demasiado impulsivo, por otro lado lo
concreto es que no hay mucho espacio para querer algunas cosas es como querer
todo y solo lograr algunas cosas porque no se puede tener todo en la vida y
llega un momento en que tiene que elegir y esa elección es cada día, cada día
estamos decidiendo todo, desde lo que parece obvio a lo muy importante y en ese
camino estoy porque me tomo el tempo para no tomar con la mano la ilusión que
se puede diluir pero tampoco puede tener la mano demasiado abierta para no
tener nada siendo esto lo más cercano a la realidad.
Y en medio de todo esto está el plan que parece una ilusión, es sábado
en la noche y siento el golpe del vacío y entonces caigo en la realidad,
mientras viajo en el bus no puedo evitar pensar que no me queda otra cosa por
ahora que seguir distraído en el trabajo sin pensar mucho, pero en el fondo no
puedo sacarme la idea de la cabeza que tendré que hacer un jugo con los limones
que caen del cielo y eso me frustra pero ya no me enoja, inevitablemente me
hace reflexionar; pase años peleando con todo lo que estuviera en mi camino para poder elegir lo
que quisiera, ahora podría escribir frases oscuras de las cuales seguro me
arrepentiré después.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario