Había una vez un gato atigrado. El gato murió un millón de veces y renació otro millón de veces, tuvo varios dueños pero no quería a ninguno. El gato no le temía a la muerte. Un día el gato fue liberado, era un gato callejero. Él conoció a una gata blanca y los dos gatos vivieron felices juntos. Los años pasaron y la gata se murió de vieja. El gato lloró un millón de veces y después murió. No volvió a revivir..tienes la bienvenida a una parte de mi vida.

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domingo, 8 de noviembre de 2020

Don't know why

 

Entonces confirme que podía llevar bien las cosas sin embargo también tenia una ligera sospecha que durante ese tiempo como tenia todas las ganas de tener un vínculo mucho más cercano y profundo toda eso daba como resultado, que utilice todas las posibilidades y variables que tenia al alcance, no solo era la idea de una metralla de preguntas si no estar atento detrás de los detalles, como siempre no tuve que hacer mucho para evitar contar mucho de mí, cuando la balanza se inclinaba solo cambiaba de tema y todo seguía normal, a veces con algo de intención ofrecía contar mas sabiendo previamente que no pasaría. Muy seguro de mi accionar el tiempo pasaba, pero como nada está siempre bajo control, paso que ya no podía más había llegado a mi tope y no importaba lo que hiciera ya tenía la confirmación que no podría avanzar más. 


Es cierto que casi todo lo que hice fue con la intención de trasmitir una segunda idea que necesariamente tenia que ser completada, hace tiempo deje de usar la cuchara donde daba todo explicado, o si lo hacia era porque tenia la idea que aun podía fortalecer el vinculo de alguna manera y casi siempre nunca resulto. Luego se puso peor podía ver lo que simplemente optaba por no ver para tratar de ver más lo positivo y la costumbre hizo el resto deje de tener interés y cuando esperaba que como siempre entre en la misma dinámica de atención, no lo hacía, debido a que no encontraba sentido hacerlo sin saber que había una posibilidad remota, derivaba esos esfuerzos a otras acciones con las que me sentía mejor y dejaba de estar esforzándome en vano.

Finalmente, es cierto que no sirve de mucho tampoco hacer un corte tajante creo que ahora funciona y es menos agresivo hacer las cosas con más tranquilidad, además las condiciones cambian y uno o se adapta o lo deja, por mi lado de tiempo en tiempo me cuestiono si estoy haciendo bien las cosas, pero trato de estar bien no solo con los demás si no principalmente bien conmigo mismo, es por eso que hace rato estoy evitando varias nuevas aventuras que se que no me llevaran a nada, lo que creo que me esta gustando estar en una etapa estable y tranquila. Como es obvio en este periodo no estoy rengando, no me estoy peleando con el mundo y ciertamente no me llama mucho la atención escribir por la obvia idea que no hay mucho que decir, después de mucho tiempo no tengo nada el horno como para compartir.

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